ARS MÁGICA de Nerea Riesco - 22-07-2010




SINOPSIS:

Principios del siglo XVII. Una mujer aparece muerta en Santesteban y todo parece indicar que se trata de un crimen cometido por el demonio y sus secuaces. La zona lleva meses siendo azotada por los brujos pese a que, un año antes, once personas de la zona fueron condenadas a morir en la hoguera por ello. El pueblo está asustado y, para tranquilizarlo, el Santo Oficio decide proclamar un edicto de gracia que perdone a los que se arrepientan de sus tratos con el demonio, y el severo inquisidor Alonso de Salazar Frías es el encargado de llevarlo a término visitando la zona. Pero Salazar no cree en brujerías, ni en hechizos y lo peor de todo, ni siquiera cree que exista el diablo porque ha perdido la fe, aunque nadie lo sospecha.

Alonso de Salazar Frías utilizará, para desentrañar el misterio de las brujas, los estudios anatómicos de Leonardo Da Vinci, técnicas forenses aprendidas en Roma, los conocimientos de los boticarios para analizar untes mágicos… en definitiva, basará su investigación en hechos verificables para establecer lo que hasta ese momento se había enjuiciado por suposiciones.
Mientras tanto, una muchacha llamada Mayo de Labastida D'Armagnac, hija bastarda del diablo con una humana (según todos los indicios vertidos en su nacimiento) y dedicada a vender hechizos de pueblo en pueblo, ha perdido a su compañera de viaje precisamente porque fue detenida antes del auto de fe, aunque no estaba entre los condenados. Para encontrarla, Mayo decide seguir los pasos de Salazar, al que protege con sus hechizos y ensalmos sin que éste se percate de su influencia benefactora.

A lo largo de su viaje, ambos tendrán que enfrentarse a los poderes diabólicos que esparcirán mil inconvenientes a su paso, a la falta de fe y a la muerte de las personas que más aman en el mundo.
Una apasionante trama que va más allá de las intenciones malignas del diablo y en la que se ve involucrada la flor y nata del panorama dirigente español del siglo XVII.

Una novela en la que la objetividad más absoluta se enfrenta a la fuerza de la tradición mágica.

OPINIÓN:



En ella hemos encontrado un poco de todo, o lo que es lo mismo, creo que cada persona que se acerque a la obra, podrá disfrutar con ella independientemente de sus gustos.
En primer lugar podría decirse que se trata de una novela histórica. Habla de un proceso de brujería real que se llevó a cabo a comienzos del siglo XVII en España. Pero el hecho de que se hable de un proceso Inquisitorial no hace que la lectura se haga oscura, por el contrario, la autora narra con una dulzura y una magia deliciosas. En ocasiones te hace reir y en otras te encoge el corazón por la ternura que despiertan algunos personajes.
Uno de ellos, por ejemplo, es un un personaje histórico real. Un inquisidor llamado Alonso de Salazar y Frías "el abogado de las brujas" que no creyó posible que existiesen personas con poderes mágicos y que, por lo tanto, nadie más debería morir en la hoguera condenado por brujería. El caso es que la novela entera se basa en las investigaciones de este Grissom del siglo XVII que utiliza las más avanzadas técnicas de la época (como la consulta a boticarios para que analizaran los ungüentos mágicos) para desmontar la teoría de las brujas. Todas sus investigaciones están recogidas en el Archivo Histórico Nacional de Madrid. (Se ve que la autora se ha documentado que da gusto porque al final de la novela aparece toda la bibliografía).
Por otra parte, hay una historia paralela: La de una curandera, hechicera, o brujilla de la época (como queramos llamarla) que sigue los pasos del inquisidor con un propósito muy concreto (que no vamos a comentar para no "destripar" la novela). Esta historia nos arrastra hasta nuestros origenes, las leyendas, las tradiciones ancestrales, la sociedad matriarcal, los ritos a la luz de la Luna...
Cada capítulo lleva el título de las recetas mágicas que se explican en el interior. Así, gracias al libro, podemos aprender a confeccionar un filtro de amor, evitar que nos parta un rayo o protegernos contra el mal de ojo.
En resumen, lo que os comentábamos, la novela tiene para satisfacer todos los gustos:

1) Una historia real que nos lleva al pasado (siglo XVII), para los que les guste la novela histórica de la que aprender algo sobre nosotros.
2) Un triller al más puro estilo de "El nombre de la Rosa".

3) Una historia de amor tanto romántico, como amistoso, como humano.
4) Una historia de aventuras, con viajes, peligros, demonios y villanos incluidos.

5) Un grimorio en el que se recogen diversas recetas mágicas de la época.
6) Una lección de filosofía, gracias a los pensamientos del protagonista masculino, el inquisidor que ha perdido la fe, Alonso de Salazar y Frías.

ATLA DE GEOGRAFÍA HUMANA - ALMUDENA GRANDES -- MAYO DE 2010



Cuatro años le llevó a Almudena Grandes escribir su cuarta novela en la que cuatro mujeres cuentan en primera persona su propia historia en un tiempo de confusión ideológica y crisis generacional. Un tiempo que, sin duda, ni ellas mismas, ni los lectores atrapados en las redes de la novela, podrán olvidar. Por su enérgica plenitud, por el absoluto control del lenguaje y la estructura novelesca, Atlas de geografía humana supone la definitiva consagración de una escritora que, un libro tras otro, nunca ha dejado de sorprendernos. En el Departamento de Obras de consulta de un gran grupo editorial, cuatro mujeres trabajan en la confección de un atlas de geografía en fascículos. Reunidas por azar en ese proyecto, y muy distintas entre sí, todas comparten, sin embargo, una edad decisiva, en la que el peso de la memoria matiza ya la conciencia del tiempo y de la Historia. Mientras investigan, buscan materiales y fijan datos, Ana, Rosa, Marisa y Fran se encuentran en ese punto de inflexión de la vida en que no pueden aplazar más la necesidad de encararse de una vez consigo mismas, despejar dudas, deseos y contradicciones ya insostenibles para situarse ellas mismas en su propia geografía, en su propio atlas. Así, iremos descubriéndolo todo sobre cada una de ellas y sobre el mundo que las rodea, que no es otro que el de toda una generación: su soledad, sus inhibiciones, sus sueños truncados, sus decepciones, pero también sus pasiones y sus amores inconfesados, su dureza y su ternura, sus derrotas y sus grandes conquistas. Almudena Grandes consigue aquí la difícil y delicada tarea de tramar, mediante la «pequeña historia» de cuatro mujeres, un gran fresco lleno de resonancias que configuran exactamente lo que sugiere el título: un atlas de geografía humana.

LEER A SU LADO -- de Elvira Lindo (Un elogio para la lectura)

Leer. Leer sin ganas. Leer por aburrimiento. Leer para no hacer ruido. Leer para dejar que tu padre duerma la siesta. Leer porque no te dejan poner la tele. Leer porque ya nadie quiere contarte un cuento. Leer porque te han castigado sin salir. Leer porque estás en la cama con fiebre. Leer porque estás solo. Leer porque imitas a tus hermanos mayores. Leer porque lo hace tu madre. Leer libros para niños. Leer novelas que no te dejan leer. Leer hasta que te apagan la luz. Leer sin leer, pensando en otra cosa. Leer en la biblioteca. Leer todos los libros de la biblioteca infantil. Leer porque tu hermana lee en la cama de al lado. Leer libros de Tintín en casa de tu abuelo. Reir porque tu tía llora con una novela. Llorar porque te da pena el abominable hombre de las nieves. Leer y leer y leer cinco líneas sobre sexo. Leerlas y leerlas una vez más. Leer porque quieres estar solo. Leer porque te sientes solo. Leer porque te crees distinto. Leer para encontrar almas gemelas. Leer aquello que aún no has vivido. Leer para llenarte la cabeza de pájaros. Leer para presumir. Decir que has leído un libro que no has leído. Resumir libros en literatura que no has leído. Sacar buenas notas en literatura haciendo resúmenes de libros que no has terminado. Leer para imitar lo que que has leído. Leer para fardar. Leer para ligar. Leer para consolarte de un abandono. Leer por falta de planes. Leer por falta de amor. Leer porque se ha ido con otra. Leer para que no digan. Leer mientras esperas. Leer sentado en el wáter. Leer para dormirte. Leer para poder hablar con él. Leer el libro que él te recomendó. Leer para sorprenderle. Leer por puro gusto. Leer por vaguería. Leer porque no te gustan los deportes. Leer porque no tienes un duro. Leer para olvidar. Leer para recordar. Leer para aprender. Leer un coñazo impresionante. Leer un libro que no quieres que se acabe. Leer el libro de un amigo. Leer todos los libros de un hombre que te gusta. Leerle el pensamiento. Leer el libro que él está leyendo. Leer el libro que él querra leer después. Leerle a tu hijo. Leerle hasta que se quede dormido. Leerle hasta que te quedas dormida. Leerle el Tintín que tú leíste. Leerle cuando se muere el Abominable Hombre de las Nieves. Leerle y consolarle luego su llanto inconsolable. Leerle para que aprenda a estar solo. Leerle para volver a vivir la infancia. Leerle por gusto. Ver cómo un hijo lee. Releer. Leer sólo lo que te gusta. Leer sólo aquello que te emocione. Leer por amor. Leer a su lado.

MERCADO DE ESPEJISMOS de FELIPE BENÍTEZ REYES


Esta obra, del roteño Benítez Reyes, fue galardonada con el último Premio Nadal (vitola de calidad) y es una verdadera obra maestra digna de leer. Recordando aquellas novelas del XVI, donde con las más simples estructuras se nos narraba lo más oscuro, el autor consigue un ambiente propio que engancha al lector.


En el intento de parodiar un poco las novelas de misterio histórico que intentan apostolar sobre los más diversos hechos, se nos cuenta la historia de unos investigadores (por así decirles) que deben robar la reliquia de los tres Reyes Magos en la Catedral de Colonia.

El modus operandi de los protagonistas es de lo más diverso y es ahí donde el escritor demuestra por qué es uno de los más importantes del panorama literario nacional. Cada personaje está forjado línea a línea y se llega a cogerles cariño. Demuestra un poco la otra cara de esos personajes a los que otros autores ponen en la disyuntiva de descubrir misterios imposibles.

Comentó su autor sobre la obra:

Mercado de espejismos es también, ha añadido el autor, un “diagnóstico de la fragilidad de nuestro pensamiento, de las trampas de la imaginación y de la necesidad de inventarnos la vida para que ésta adquiera realidad”. En opinión de Benítez Reyes, “en la literatura es habitual establecer una distinción genérica que es artificial y artificiosa” y argumenta en favor de su origen poético que “una condición para escribir novelas es escribir poesía, pues la poesía tiende a la precisión, a procurar que las palabras hagan un doble esfuerzo y al final actúa en beneficio de la novela”.

FEBRERO 2010

PENDIENTE DE COMPLETAR

LA CINTA ROJA de CARMEN POSADAS (ENERO 2010)



En esto de hacer reseñas, me he encontrado con tres situaciones distintas: la de los libros que no me han gustado o me han decepcionado, es incómoda pues hay que decir educadamente lo negativo y buscar lo que se pueda salvar. La de los libros que me gustan, ésas son fáciles, claro. Por último, la de los que me gustan y mucho, pero no sé cómo hincarles el diente. Así me he visto en dos ocasiones, una, por falta de formación propia que se solucionó con el ofrecimiento a reseñarla de alguien más preparado y apropiado para hacerlo (ejem, ejem); otra, en ésta ocasión, por distintas razones. Así que allá va.

La novela se narra en primera persona, en los años comprendidos entre los albores de la Revolución francesa y la subida de Napoleón al trono como primer hombre de Francia. La ambientación es excelente, llena de poesía en el lenguaje y buen gusto en el detalle, lo que crea unos escenarios de una plasticidad casi real. El vestuario, descrito con soberbia elegancia de quien entiende que es importante la primera impresión y está acostumbrada a apreciar cada complemento en un solo vistazo; las casas, recreadas con las sensaciones que transmiten al entrar en ellas, desde las lujosas mansiones llenas de ornamentos de época a las cárceles, donde uno no puede evitar oler la suciedad y un gesto de asco ante la inmundicia.
El entramado histórico es interesante, riguroso con los datos y a la vez con esa desmitificación que da el vivir en primera persona los hechos que a lo largo de los años se magnificarían o se despreciarían.

Hasta aquí, es fácil. Ahora viene lo complicado. Los personajes, correctamente construidos y desarrollados, tienen esa objetividad del paso del tiempo y arrastran el juicio de la Historia en ellos, pero es que ninguno importa, sólo son comparsas necesarios para explicar distintos hechos, igual que los decorados o los atuendos. Porque lo importante del libro, a pesar del reclamo histórico y del paralelismo con la Pimpinela, es su protagonista.

Es Teresa Cabarrús un personaje lleno de claroscuros según reza y resume la contraportada. Y es así en cuanto a las vicisitudes que tuvo que pasar por aquellos turbulentos años. Se vio en todas las situaciones posibles: aristócrata, amante de los poderosos, revolucionaria, espía, condenada a morir en la guillotina, salvadora de infelices… todos estos adjetivos son los que aparecen en sus biografías pero de nuevo no dejan de ser más que parte del escenario, escenario, repito, bien edificado.

Pero es la Teresa Cabarrús que crea la autora, la que me ha fascinado. Y he aquí la verdadera dificultad de hacer esta reseña, porque en ese sentido, no es un libro de historia. Es un verdadero tratado sobre la supervivencia de la mujer en la historia que escriben los hombres, con las únicas armas que dispone: su belleza y su inteligencia.

Teresa es una figura controvertida y a la vez simple, sus acciones pueden juzgarse frívolas o comprometidas, interesadas o generosas, intrigantes o inocentes, apasionadas o manipuladoras, depende del cristal con qué se miren. Por encima de todas ellas, sin justificarlas ni avalarlas con una moral hecha a la época, con honestidad y sinceridad, se sitúa este peón de segunda fila histórica, como tantos habrá habido, testigo privilegiado de acontecimientos tan importantes, que supo capear y salir bien parada de ellos, sin renunciar a una vida intensa. Y, siento parecer sexista, pero los pensamientos íntimos de una mujer sólo los puede comprender otra. La importancia de un adorno en el pelo, una mirada estudiada para causar un efecto determinado, la clasificación de un individuo con un vistazo, el olfato de cómo cambian los vientos políticos y los afectos populares… todo esto rezuma página tras página ese sexto sentido femenino que ella supo aprovechar y la escritora apreciar. Por encima de prejuicios y estereotipos, con autenticidad y solidez.

Mención aparte merece el capítulo amoroso. En ella se dieron todos los casos posibles en las relaciones sentimentales: el primer amor, breve e idealizado; el interesado aunque tierno y casi maternal; el profundo y no correspondido; el conveniente y tranquilo: el ocasional y desenfadado; el fiel y duradero… y lo sorprendente, de todos aprendió y salió airosa llevándose lo mejor de ellos y dejando lo que le pedía el alma en cada momento.

En resumen, los amantes de la Historia, encontrarán algunas curiosidades más que añadir como anécdotas a ese saber. Los lectores que busquen entretenimiento lo tendrán, pues la acción no desmerece, con algunos pasajes mejor conseguidos que otros. Aquellos que no esperen nada, se dejarán cautivar por ese carácter que, especialista en hacerlo en su época, parece alargar su poder seductor hasta nuestros días.

NATIVEL PRECIADO EN LA BIBLIOTECA FERNANDO PALANQUES

El Viernes 13 de Noviembre nos visitó la escritora y periodista Nativel Preciado. Compartió con todos los asistentes unas horas (pasaron volando) inolvidables.
A continuación escribo mi crónica del encuentro. Siempre escribo como Club de Lectura, hoy me voy a permitir la libertad de escribir en primera persona, pues lo que os comento es mi visión y sensación de una cita excepcional.

NATIVEL PRECIADO Y LOS LUGARES COMUNES (por Manolo Gutiérrez Castillo)

Viernes y 13 (de noviembre). Encuentro con Nativel Preciado en la Biblioteca Municipal de Vélez Rubio. De Nativel he leído "El egoista" y "Bodas de Plata" gracias al Club de Lectura. Hasta ahora Nativel no era una de mis escritoras de culto, pero a partir de ahora lo va a ser, en este encuentro me ganó para su causa lectora. Es encantadora en un doble sentido: es muy amable y cercana, y por otro lado encanta al que la escucha, tiene un discurso y un tono de voz que te atrapan para siempre. A lo largo de la tarde-noche utilizó en varias ocasiones "lugares comunes", luego en la copita de vino español se lo comenté y le pregunté si había visto la película con el mismo nombre, película dirigida por Aristarain y protagonizada por Federico Luppi y Mercedes Sampietro. Me comentó que no y le sugerí que la viera.Me gusta la gente que tiene un sexto sentido, Nativel lo tiene. Cuando me firmó "Camino de hierro", y no había hablado ni una sola palabra con ella, ya me desconcertó con lo de "gracias por acompañarme en este camino literario", pero cuando me dejó con "las patas parriba" es cuando me respondió a la pregunta que le hice sobre el carmen que aparece en "El egoista"; yo soy "granaíno" y siempre me pareció que se trataba del carmen de los Rodríguez-Acosta, e incluso identifiqué al "prota" con el Rodríguez-Acosta (el banquero) que todos los días bajaba en su Porche por la empedrada Calle Real, calle en la que yo vivía y jugaba al fútbol. Nativel me dijo que se iba a explayar en la respuesta: efectivamente el carmen es el carmen, pero el prota no es el Rodríguez-Acosta banquero. Muchos granaínos que han leído su novela han tenido también esa errónea asociación, algo que en varias ocasiones ha tenido que explicar Nativel.Es maravilloso leer una novela y que en ella aparezcan lugares comunes, y lo que ya es descomunal es hablar de esos lugares comunes con la escritora. Nativel, muchísimas gracias por tratar a tus lectores con auténtica pasión.